viernes, 3 de abril de 2020

Su reserva de lágrimas


Y él vertió la reserva casi completa de sus lágrimas, y solo volvió a llorar en muy raras ocasiones...
Aprendió a masticar sus penas en soledad y con dignidad...
Convenciéndose de que a casi nadie le importan los problemas y las penas ajenas...y que los dolores siempre acaban por diluirse...





1 comentario:

  1. Seguramente hay personas a las q les impprtan tus problemas.
    Hay q aprender a reconocerlas.
    Y si das con alguna/o: valorarlo.
    El tiempo de una persona escuchando tus problemas y secando tus lágrimas, vale mucho y es amor.
    En alguna forma estar y escuhar es amor.
    Y eso hay q valorarlo.

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